Los Lakers dominaron ampliamente a los Wolves (94-85) con una excelente actuación de Luka Doncic (31 puntos, 12 rebotes y 9 asistencias) este martes en casa. Al mando del partido de principio a fin, los angelinos vencieron sin titubeos a un equipo de Minnesota irreconocible en comparación con el Juego 1 (derrota 117-95). Aun así, JJ Redick, el coach de L.A., no dudó en reprender duramente a sus jugadores en pleno tercer cuarto para frenar la remontada de los Wolves, que pasaron de estar 22 puntos abajo a reducir la diferencia a solo 11 en menos de 5 minutos.
Encendido como nunca, con la mirada fulminante, el ex francotirador de Duke soltó toda una serie de gritos e insultos para despertar a sus jugadores. Una arenga poco habitual sobre la que JJ Redick habló después del partido.
“No es algo que me guste hacer. Y no es una práctica con la que me sienta particularmente cómodo. Pero creo que esta noche, había que provocar una reacción.”
Más allá de sus duras palabras hacia sus jugadores, JJ Redick también destacó un elemento clave del encuentro para explicar la gran victoria de los Purple & Gold.
“Jugamos con intensidad esta noche. Y creo que los Playoffs de la NBA exigen otro nivel de dureza. Como dije, nos tomó dos cuartos y medio alcanzar ese nivel de intensidad en el Juego 1.”
Los Lakers mostraron una cara totalmente diferente este martes y lograron desestabilizar por completo a los Wolves, en gran parte gracias a un excelente trabajo defensivo que les permitió limitar a los compañeros de Rudy Gobert a solo 85 puntos, su menor cantidad anotada desde el pasado 4 de diciembre. Una hazaña que los dirigidos por JJ Redick deberán repetir este viernes en Minnesota en el Juego 3.
Crédito: © Kiyoshi Mio-Imagn Images
NBA 
